Los esteroides son extremadamente eficaces para aliviar el dolor y la inflamación en el cuerpo, y pueden salvar la vida.
Normalmente se administran para afecciones como la artritis, el asma y el eczema. Sin embargo, como ocurre con la mayoría de los medicamentos, tienen efectos secundarios, como el aumento de peso.
¿Qué son los esteroides?
Los esteroides, o corticosteroides, son medicamentos antiinflamatorios. Hay muchos tipos y se venden bajo varias marcas:
- Prednisona (Deltasone, Sterapred)
- Metilprednisolona (Medrol)
- Prenisolona (Prelone, Pediapred)
- Dexametasona (Decadron, Hexadron)
- Hidrocortisona (Acticort, Cortef)
¿Cómo provocan los esteroides el aumento de peso?
Los esteroides afectan al equilibrio de sodio (sal) y, por tanto, aumentan la retención de líquidos. Provocan un aumento de peso al incrementar el apetito y la redeposición de grasa alrededor del cuello y el abdomen. Debido a la inflamación crónica y al dolor, usted será menos activo y esto también contribuirá al aumento de peso.
¿Cómo controlar el aumento de peso?
No hay un camino fácil para perder peso por los efectos secundarios de los esteroides. Sin embargo, hay seis pasos que puede seguir para controlarlo:
Paso 1: Planifique sus comidas
Sea consciente de la cantidad de calorías de los alimentos que está comiendo. Así podrás reducir la cantidad total de calorías que normalmente consumes en un 10-20%. Puede buscar en Internet para obtener el contenido calórico de los alimentos que consume normalmente. Contar las calorías es un método de pérdida de peso.
Paso 2: Llevar una dieta saludable
Un efecto secundario importante es el aumento del apetito. Por lo tanto, es importante que lleves una dieta saludable con alimentos bajos en calorías pero ricos en nutrientes. Coma muchas frutas y verduras y proteínas magras. Comience el día con un desayuno rico en proteínas para poner en marcha el metabolismo del cuerpo. Toma mucha grasa buena Omega-3 procedente del aceite de oliva, el salmón y otros pescados grasos o suplementos de Omega-3.
Paso 3: Reduce el azúcar
El azúcar en la dieta aumenta el desequilibrio de la insulina y la deposición de grasa. Además de las bebidas azucaradas, el azúcar normalmente proviene de los carbohidratos simples, como los alimentos con almidón, el arroz blanco, las patatas, los fideos, los pasteles, la bollería y las galletas. Por lo tanto, asegúrate de comer más carbohidratos complejos procedentes de frutas, verduras, boniatos, tapioca y cereales integrales.
Paso 4: Sal y agua
Bebe mucha agua para controlar la retención de líquidos. Controla también la cantidad de sodio (sal) que consumes para controlar la retención de líquidos. El agua también es un analgésico natural: se necesita una media de 30 ml por kilo de peso corporal.
Paso 5: Ejercicio
El dolor en las articulaciones, o en cualquier otra zona, debido a la inflamación puede determinar el tipo de ejercicio adecuado a las condiciones particulares. Caminar, nadar y el yoga deben ser considerados ya que no son de alto impacto y pueden ser de baja intensidad.
Si no hay dolor, entonces el entrenamiento con pesas y el ejercicio aeróbico ayudarán a quemar grasa. La clave es hacerlo con regularidad – al menos cinco veces a la semana.
Paso 6: Detox
Limpiar el sistema digestivo y desintoxicar el hígado para reducir las toxinas en el cuerpo. La reducción de la carga de toxinas ayudará a reducir la inflamación y el dolor, lo que reduce el requerimiento de esteroides.
Los esteroides pueden salvar vidas, pero los efectos secundarios del aumento de peso deben ser manejados adecuadamente. Siga los pasos anteriores y estará en camino hacia la recuperación.