Los gatos suelen desarrollar abscesos, pero hay diferentes razones por las que puede aparecer una de estas inflamaciones. Algunos pueden incluso pasar desapercibidos para el dueño del gato hasta que se rompe o aparecen otros signos. Saber a qué atenerse y luego cómo tratar un absceso en el gato es una parte importante para ayudar a mantenerlo feliz y sano.
¿Qué es un absceso?
Un absceso es una bolsa infectada de pus y el pus es un líquido espeso que está lleno de bacterias, glóbulos blancos y otras cosas. Se forman como resultado de la respuesta del cuerpo a una infección. Los abscesos pueden encontrarse en todo el cuerpo y pueden hincharse hasta ser muy grandes o permanecer pequeños en un gato. Algunos abscesos crecerán hasta ser tan grandes que incluso pueden romperse provocando la salida del pus.
Signos de un absceso en un gato
- Hinchazón localizada
- Señal de salida de una hinchazón
- Falta de olor
- Mal aliento
- Falta de apetito
- Pérdida de peso.
- Alargo
- Fiebre
Los abscesos en los gatos suelen aparecer como una hinchazón bajo la piel, pero también pueden pasar desapercibidos dentro del cuerpo o en la boca, bajo las encías. Como hinchazón de la piel, los abscesos tienen el mismo aspecto que un tumor o bulto, pero pueden aparecer de forma más repentina. Si la hinchazón se estira demasiado, puede hacer que la piel se desgarre y empiece a supurar pus. Esto da lugar a un olor desagradable de la zona infectada que gotea.
Si un absceso está dentro de la boca, un gato puede tener especialmente mal aliento, no querer comer y volverse letárgico. Los abscesos en el interior del cuerpo también pueden provocar letargo y una disminución del apetito, ya que son indicativos de una infección. Las infecciones sistémicas hacen que el gato se sienta mal y desarrolle fiebre.
Causas de los abscesos en gatos
Los tipos más comunes de abscesos en gatos son en la boca y bajo la piel, pero los abscesos pueden aparecer casi en cualquier lugar dentro o sobre un gato. Los abscesos suelen describirse por el lugar del cuerpo en el que aparecen y están causados por diversas bacterias, como E. coli, ciertas especies de Streptococcus, Pseudomonas, Mycoplasma, Pasteurella multocida, Corynebacterium, Actinomyces, Nocardia, Bartonella, Bacteroides, Clostridium y Fusobacterium.
Diagnóstico de los abscesos en los gatos
Si un veterinario sospecha que hay un absceso en la piel por una herida por mordedura u otra lesión en un gato, puede clavar una aguja con una jeringa conectada para ver qué hay dentro. Si se trata de un absceso, se drenará el pus, pero si se trata de un tumor, no. Este tipo de abscesos suelen ser muy fáciles de diagnosticar sin necesidad de hacer muchas pruebas.
Si se sospecha de un absceso dental, un veterinario examinará la boca del gato en busca de evidencia de pus, pero será necesario aplicar anestesia y realizar radiografías para inspeccionar a fondo la boca. Los abscesos aparecerán en las radiografías y se utilizarán sondas dentales para examinar los dientes.
Si se sospecha de un absceso interno, el ultrasonido puede ayudar a un veterinario a diagnosticarlo, pero la visualización de la bolsa llena de pus puede tener que hacerse en la sala de operaciones. La cirugía suele ser necesaria para encontrar abscesos internos.
A veces se realizan cultivos bacterianos para diagnosticar el tipo específico de bacteria que causa el absceso. Esto ayudará al veterinario a tratar el absceso.
Tratamiento de los abscesos en gatos
Se utilizarán antibióticos y otros medicamentos para tratar el absceso. Las extracciones dentales pueden ser necesarias para los abscesos de la raíz del diente junto con una limpieza dental completa. La cirugía puede ser necesaria para extirpar los abscesos de la piel para permitir que la infección drene o para eliminar el absceso si es interno.
Cómo prevenir los abscesos del gato
El cuidado dental regular es clave para ayudar a prevenir la formación de abscesos dentales. Algunos gatos tienen más problemas que otros con las enfermedades dentales, pero mantener sus dientes limpios puede ayudar a prevenir los abscesos.
Mantener a los gatos dentro de casa ayudará a prevenir los abscesos por mordedura. Esto no siempre es posible, por supuesto, pero un gato no puede tener una herida por mordedura sin que otro animal esté cerca, así que es la mejor manera de prevenirlos.