Encontrar fuentes: «Latido del ápice» – noticias – periódicos – libros – scholar – JSTOR (diciembre de 2009) (Aprende cómo y cuándo eliminar este mensaje de la plantilla)
El latido del ápice (lat. ictus cordis), también llamado impulso apical, es el pulso que se siente en el punto de máximo impulso (PMI), que es el punto del precordio más alejado hacia fuera (lateralmente) y hacia abajo (inferiormente) del esternón en el que se puede sentir el impulso cardíaco. El impulso cardíaco es la vibración resultante de la rotación del corazón, que se desplaza hacia delante y golpea contra la pared torácica durante la sístole. El PMI no es el vértice del corazón, sino que se encuentra en el precordio, no muy lejos de él. Otra teoría para la aparición del PMI es la contracción sistólica temprana de las fibras longitudinales del ventrículo izquierdo situadas en la superficie endocárdica de esta cámara. Este período del ciclo cardíaco se denomina contracción isovolumétrica. Dado que la contracción comienza cerca de la base del ventrículo izquierdo y se extiende hacia el vértice, la mayoría de las fibras longitudinales del ventrículo izquierdo se han acortado antes del vértice. El rápido aumento de la presión desarrollado por el acortamiento de estas fibras hace que la válvula aórtica se abra y que el ápice se desplace hacia fuera provocando el PMI. La disección anatómica de la musculatura del ápex revela que las fibras musculares ya no están orientadas longitudinalmente, sino que forman una masa espiral de tejidos musculares que también puede tener un efecto sobre la capacidad del ápex para contraerse longitudinalmente. Tras la contracción de las fibras longitudinales, la expulsión de la sangre del ventrículo izquierdo se produce por la acción de escurrir (como se escurre un paño) de las fibras musculares circunferenciales del ventrículo izquierdo que se encuentran en la porción media del ventrículo y se contraen después de las fibras longitudinales. Durante la contracción de las fibras longitudinales, el volumen del ventrículo izquierdo no ha cambiado, manteniendo el ápice en íntimo contacto con la pared torácica, lo que permite sentir el movimiento del ápice hacia fuera antes de que el corazón se vacíe más del 55% de su volumen y el ápice se separe de la pared torácica. (3)