Qué causa la apnea
Hay muchas razones por las que un bebé puede tener periodos de apnea, incluyendo inmadurez cerebral (Apnea del Prematuro), problemas neurológicos, enfermedades cardíacas, problemas gastrointestinales, causas infecciosas y problemas genéticos. En algunos casos, no podemos encontrar una razón para la apnea. Normalmente, el cerebro controla la respiración automáticamente. Durante el sueño, cuando el cerebro está menos activo, la respiración se vuelve más lenta y superficial. También es normal que los bebés (y algunos adultos) tengan breves pausas en la respiración. En la apnea infantil, estas pausas son demasiado largas. A veces la apnea se produce porque las áreas del cerebro que controlan la respiración no responden como deberían, pero la mayoría de los bebés mejoran con el tiempo. En algunos bebés, no está claro por qué hay pausas en la respiración.
Pruebas para encontrar la causa de la apnea
Se podrían hacer pruebas para encontrar la causa de los episodios de apnea de su bebé. Durante las pruebas, las enfermeras observarán a su bebé atentamente y anotarán sus actividades. Necesitamos saber qué ocurre antes, durante y después de los periodos de apnea. Por eso es posible que su bebé necesite pruebas. Tenemos que averiguar qué causa la apnea para poder dar a su bebé los cuidados adecuados.
Lo que podemos hacer
Aunque no sepamos qué causa las pausas respiratorias de su bebé, hay algunas cosas que podemos hacer para ayudar a prevenir complicaciones. Podemos:
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Darle a su bebé medicamentos para reducir las pausas respiratorias.
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Enseñarle cómo hacer que el entorno de su bebé sea lo más seguro posible.
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Enseñarle qué hacer (como la RCP infantil) si su bebé deja de respirar en casa.
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En muy raras ocasiones puede ser necesario colocar a su bebé un monitor de apnea para detectar las pausas en la respiración. Aunque el monitor se coloca para detectar tanto la apnea como la bradicardia, no cura la apnea y puede que no prevenga el SMSL o la muerte.
Qué esperar
Recuerde que esto suele ser una condición temporal. Si a su bebé se le colocó un monitor, se le mantendrá hasta que el riesgo de apnea parezca haber desaparecido.
El momento de dejar de usar el monitor de apnea es diferente para cada bebé y familia. El personal de enfermería y el médico lo comentarán con usted en cada visita a la clínica y le ayudarán a tomar las mejores decisiones para usted y su bebé.
Advertencia: No deje de usar el monitor hasta que su médico se lo indique.
Lo que puede hacer
La apnea puede aparecer rápidamente y sin previo aviso, especialmente en momentos de estrés o infección. El monitor que se coloca a su bebé está especialmente hecho para alertarle de cualquier posible periodo de apnea o bradicardia. Lo mejor que puedes hacer como padre es estar preparado. Los médicos y las enfermeras te enseñarán a atender las necesidades especiales de tu bebé. Usted puede:
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Leer atentamente toda la información que le den.
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Preguntar cualquier duda que tenga.
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Participar activamente en el cuidado de su hijo.
- Díganos lo que piensa y siente.
- Déjenos ayudarle a cuidar de su bebé.
Sabemos que es un momento difícil para usted y su familia. Recuerda que se trata de una condición temporal. Juntos, podemos ayudar a tu bebé a crecer y desarrollarse como un niño normal y sano.
Recuerdos sobre el cuidado del bebé
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No se debe permitir fumar en la casa o en el coche. Un bebé menor de 6 meses tiene el doble de riesgo de morir por el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL) si respira el humo de segunda mano.
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Los bebés deben dormir boca arriba hasta los 12 meses de edad.
- Se ha sugerido que el uso del chupete puede reducir el riesgo de apnea.
Si tiene alguna duda, consulte a su médico o enfermera.
Apnea (PDF)