Hay algo satisfactorio en entrar en una despensa bien organizada y llena de estantes alineados con cestas etiquetadas, tarros a juego y conservas de colores coordinados. Por supuesto, un viaje a la Container Store o un vistazo a los productos de organización más populares de Amazon pueden ayudarte a convertir un desorden en un espacio digno de Insta, pero la forma más fácil de conseguir el aspecto que deseas es contratar a un organizador profesional. Y aunque definitivamente es un lujo contratar a un profesional para que se encargue del trabajo, una encuesta realizada a 830 lectores de Good Housekeeping descubrió que el 52% de las personas contrataría a un organizador profesional para su hogar, si se diera la oportunidad.
Para ser claros, tu amigo que sigue algunos perfiles de organización en Instagram (piensa: The Home Edit o NEAT Method) y le gusta etiquetar cosas por diversión no es un profesional. Sin embargo, hay más de 3.500 miembros de la Asociación Nacional de Productividad & Profesionales de la Organización que sí lo son. Pero si crees que tus proyectos de antes y después merecen un título profesional, sigue esta guía sobre cómo convertirte en un organizador profesional, que incluye consejos y trucos de gente que lo ha hecho por sí misma.
Muchos organizadores profesionales, incluyendo a Anna, una Thumbtack Pro y fundadora de Sorted by Anna, ven si su pasión merece un giro profesional con una membresía provisional a NAPO. La membresía educativa, que cuesta 299 dólares, viene con tres cursos en línea obligatorios -teoría básica de organización, habilidades para el trabajo práctico de organización y revisión del código de ética de NAPO-, así como opciones adicionales de desarrollo profesional, como eventos de networking y conferencias de la industria.
Pero las clases son sólo el principio: Si estás tratando de convertirte en profesional, acércate a tu familia y amigos y pregúntales si puedes poner en práctica tus habilidades organizativas. Nunca se sabe a dónde puede llevar esa experiencia: en el caso de Anna, impulsó su negocio. Después de que su amiga publicara fotos de su armario recién organizado, un amigo de Facebook se dio cuenta y reservó una sesión, y el resto es historia.
Durante las primeras etapas de lanzamiento de una carrera como organizador profesional, hay varias habilidades que puedes afinar.
Saber qué tipo de organizador quieres ser.
La organización no es única: hay diferentes métodos según el espacio con el que se trabaje. Jeffrey Phillip, organizador y diseñador de interiores de Nueva York, se especializa en espacios que priorizan la función y la moda. «Algunas personas prefieren centrarse en la organización corporativa, o incluso trabajar en proyectos más técnicos con clientes que son acaparadores o tienen necesidades específicas», dice. Independientemente del tipo de organización que más le interese, Phillip aclara que todos los proyectos -sin importar el tamaño- son una especie de rompecabezas. «Es la resolución creativa de problemas en su máxima expresión. Siempre estás intentando averiguar cómo mejorar algo y cuál es la nueva solución.»
Aprovecha las redes sociales.
Actualmente hay más de 2 millones de publicaciones etiquetadas con #organización en Instagram – y ese número crece por segundos. The Home Edit, un dúo de organizadores profesionales muy querido por celebridades como Gwyneth Paltrow, Khloe Kardashian y Reese Witherspoon, forma parte de la ecuación y tiene 1,5 millones de seguidores en Instagram. Mientras que sus despensas con los colores del arco iris están aparentemente en todas partes estos días, el dominio de las redes sociales era todo una parte de su estrategia cuando comenzaron su negocio en 2015. «Queríamos que nuestro trabajo fuera tan digno de Pinterest como fuera posible, así que le dimos un giro estético a una práctica funcional», explica Clea Shearer de The Home Edit. «En nuestros primeros días, ofrecimos nuestros servicios a algunos contactos de famosos como un esfuerzo estrictamente promocional». Y funcionó: Cuando The Home Edit terminaba un proyecto, hacían que sus clientes famosos (ejem, Gwyneth) publicaran una foto en su Instagram a cambio del servicio, lo que aumentaba su número total de seguidores y sus oportunidades de clientes.
Abordar los aspectos emocionales de la organización.
Aunque puede ser fácil para ti ver los tesoros de otra persona como basura (triste pero cierto), es importante recordar que incluso los cajones desordenados de tu cliente están llenos de sentimientos. E incluso si crees que conoces bien a tu cliente, descubrirás aún más sobre su vida mientras rebuscas entre sus pertenencias. «Mientras revisas las cosas, trata de entender sus hábitos, su lenguaje corporal y sus rutinas, y averigua cómo puedes marcar la diferencia», explica Phillip. «A veces, es necesario leer entre líneas para ayudar a los clientes a llegar a su objetivo final».
Descubre tu marca – y corre con ella.
Tal vez te especialices en llenar armarios con cestas del suelo al techo. O añadir cubos acrílicos transparentes a, bueno, todas las habitaciones posibles. The Home Edit dice que parte de su éxito se debe a que saben el aspecto que quieren conseguir y lo mantienen constante de una casa a otra. Queríamos una forma inteligente de poner nuestro sello en nuestro trabajo». Clea lo etiquetó todo a mano, pero a medida que íbamos creciendo, tuvimos que buscar la manera de conseguir un etiquetado coherente en los distintos proyectos de todo el país», reflexiona Joanna Teplin, de The Home Edit. «Más tarde convertimos la letra de Clea en una fuente, y ahora tenemos una estética de firma, literalmente».
Para noticias imperdibles, consejos de belleza de expertos, soluciones caseras geniales, recetas deliciosas y mucho más, suscríbete al boletín de Good Housekeeping.
SUSCRIBETE AHORA