¿Recuerdas todas esas redacciones e informes que escribías en el colegio? Se escribían para que el profesor los leyera en silencio. Rara vez se leían en voz alta. Adelántate al mundo del trabajo, donde eres responsable de escribir guiones de locución. A menos que hayas recibido una formación especial, ¿cómo podrías saber de repente cómo escribir para el oído?
Sin embargo, eso es lo que se espera que hagas cuando haces un storyboard para audio o escribes guiones de audio. Escribir para ser escuchado es un tipo de escritura diferente. Si necesita ayuda para hacer la transición del ojo al oído, aquí tiene algunos consejos.
Escriba como habla
En la mayoría de los casos, escribir para el oído es más informal que escribir para ser leído. Imagina que estás hablando con alguien mientras escribes. Cuando escribes como hablas, naturalmente utilizarás palabras más pequeñas, un tono más conversacional y frases más cortas. Consejo profesional: un guión de locución no debe sonar como si estuviera guionizado.
Vaya al grano rápidamente
Cuando escribe para audio, no tiene mucho tiempo para llegar al grano. Tienes que llegar rápidamente antes de perder a tu audiencia. Céntrate en lo más importante y sé conciso. Me gusta pensar en ello como una simplicidad inteligente.
Aprende de los anuncios de radio
¿Has dejado de escuchar la radio comercial? Puede que quieras escucharla una vez más. Puedes aprender de sus anuncios de radio de 30 segundos. Los anuncios de radio pasan volando rápidamente. Los guionistas se centran en un punto relevante. Suelen utilizar esta fórmula: dilo-explícalo-repítelo. La frase inicial llama la atención y despierta la curiosidad. Las siguientes frases proporcionan los detalles. A continuación, se repite. Esta no es una mala fórmula para los guiones de instrucción: dilo-explícalo-repítelo.
Habla con una sola voz
Quizás estés en un gran proyecto con varios diseñadores de instrucción escribiendo furiosamente, ajenos a la voz que están usando. O quizá seas el único que escribe, pero unos días empiezas con una voz y otros días utilizas otra.
Hablar con una sola voz surge de la coherencia. Suena como si el locutor entendiera el tema, porque la coherencia hace creíble al orador. Para conseguir el sonido de una sola voz, considere la posibilidad de definir estos aspectos de un guión de locución desde el principio:
- Tono: Decida el tono que mejor conectará con su audiencia (conversacional, campechano, sofisticado, etc.)
- Rol: Determine si el orador desempeña el papel de colega o compañero, de experto, de profesor o de narrador omnisciente.
- Persona: si utilizará la primera, la segunda o la tercera persona. Si se te olvida lo que es todo esto, la Wikipedia te lo explica.
- Contracciones: ¿Las usarás o no?
Luego deja que un editor ungido lea los guiones para limar todas las incoherencias.
Mantén las frases cortas pero variadas
Mucha gente recomienda usar frases cortas cuando se escribe para audio. Y es cierto que en un entorno de eLearning, no puedes contar con que tu ocupada audiencia haga clic en Replay si se pierde algo. Sin embargo, el riesgo de confiar en las frases cortas es que el guión puede sonar rebuscado o demasiado simplista.
Un mejor enfoque podría ser apuntar a frases cortas que varían en longitud. Esto se acerca más a nuestra forma de hablar. Para mantener las oraciones en el lado más corto: 1) cíñase a una idea por oración; 2) elimine toda la verborrea extra; y 3) divida las oraciones en dos siempre que sea posible.
Evite leer texto
A nadie le gustan las pantallas llenas de texto, pero hay algunas situaciones que lo exigen, debido a regulaciones legales u otros requisitos. En estos casos, utiliza el audio para introducir lo que hay que leer y luego deja que el participante haga la lectura. A los adultos les suele disgustar que se les lea un texto que está en la pantalla.
Además, Mayer aborda este tema en su Principio de Redundancia. Se necesitan más recursos cognitivos para hacer coincidir información redundante, como leer un texto mientras se escucha un audio, que para gestionar una sola modalidad. Nota: para dar cabida a los discapacitados visuales, ofrezca una opción para que el texto se lea en voz alta.
Preste atención al ritmo o compás
Hablar es similar a la música: tiene un ritmo relacionado con el tempo del discurso y la alternancia de palabras acentuadas y no acentuadas. Cuando lees tu guión de locución en voz alta, puedes mejorar el ritmo considerando las palabras como sonidos y escuchando su flujo y su tiempo. Un ritmo agradable tiene el potencial de mantener la atención del oyente durante más tiempo y de mejorar la experiencia auditiva.
Utiliza el silencio de forma eficaz
El silencio es para el audio lo que el espacio en blanco es para las imágenes. Los oyentes necesitan tiempo para procesar el contenido verbal y observar lo que aparece en la pantalla. Puedes incluir pausas breves en tu guión indicando dónde debe detenerse el locutor durante la grabación (lo que se conoce como un tiempo). Yo suelo indicarlo con una elipsis (…). Las pausas frecuentes también te dan tiempo para añadir elementos para la construcción de la pantalla. El silencio es tu amigo. Utilízalo con propósito.
Cuida tus transiciones
Las palabras de transición, como sin embargo, pero, sin embargo, por lo tanto y mientras tanto, permiten a los oyentes saber que se avecina un cambio respecto al pensamiento anterior. Utilice las transiciones como pistas para ayudar a clarificar su mensaje.
Edición por fases
Algunos escritores consumados recomiendan editar en varias pasadas mientras perfeccionan un aspecto de su escritura a la vez. En Getting the Words Right, el autor Theodore Cheney recomienda que su primera revisión se centre en los cambios masivos, que él llama reducir. Luego aconseja revisiones menos ambiciosas, como la reorganización. Por último, está la reformulación. O crea tus propias fases de edición que funcionen para tu estilo de escritura.
Calcula la duración de los segmentos
No quieres que las cosas se alarguen y se alarguen. Una regla general para calcular el tiempo es que en un minuto, un narrador leerá aproximadamente 100 palabras. Si quiere que su segmento dure un minuto, redúzcalo a 100 palabras o menos.
Lea todos los guiones de locución en voz alta
Leer el guión en voz alta es obligatorio. Así podrás determinar si la redacción es torpe o suave y si las frases fluyen de una a otra. La lectura en voz alta te ayuda a saber cuándo es mejor utilizar contracciones, si las palabras yuxtapuestas son difíciles de pronunciar y si todo el guión está bien conectado. Por último, así se sabe si un narrador es capaz de pasar por una frase sin tener que parar para respirar en medio.
Considere los efectos de sonido
Muchos productores de la radio pública añaden profundidad y realismo a sus historias mediante efectos de sonido. Cuando se utilizan con sofisticación, los efectos de sonido pueden añadir riqueza a la narración directa, los escenarios, las interacciones y los juegos. Y su coste es mínimo.
Usa la voz activa
La voz activa es aquella en la que el sujeto está realizando la acción. En la voz pasiva, el sujeto no está realizando la acción. La voz activa tiene más probabilidades de mantener la atención de los oyentes porque es una forma de comunicación clara y directa. Intente escribir en la voz activa en la medida de lo posible.
Recomendaciones para escribir con mayor eficacia:
Conseguir las palabras correctas de Theodore Cheyney
Pájaro a pájaro de Anne Lamont
Detrás de las escenas con actores a tres voces