¡HELLLOOO! LOOH. Looh. looh.
Si alguna vez has escuchado un eco, estarás familiarizado con el principio básico que hay detrás de tres tecnologías similares: el radar, el sonar y el lidar.
Un eco es el reflejo de las ondas sonoras en algún objeto lejano. Si gritas en un cañón, las ondas sonoras viajan por el aire, rebotan en las paredes rocosas y luego vuelven a ti.
El sonar (SO-nahr) es lo más parecido a este escenario. Esta tecnología también se basa en las ondas sonoras para detectar objetos. Sin embargo, el sonar se utiliza normalmente bajo el agua.
Los técnicos médicos también pueden utilizar las ondas sonoras para observar el interior del cuerpo humano (que en su mayoría es agua). En este caso, la tecnología se conoce como ultrasonido. Cuando los murciélagos, los delfines y otros animales utilizan el sonar de forma natural, normalmente para encontrar una presa, se denomina ecolocalización. Estos animales envían una serie de impulsos sonoros cortos. Luego escuchan los ecos para determinar qué hay en su entorno.
El radar y el lidar también se basan en los ecos. Sólo que no utilizan ondas de sonido. En su lugar, estas dos tecnologías utilizan ondas de radio u ondas de luz, respectivamente. Ambos son ejemplos de radiación electromagnética.
Los científicos inventaron las palabras radar, sonar y lidar. Cada una de ellas refleja la utilidad de una tecnología:
– Radar: ra(dio) d(etección) a(y) r(angación)
– Sonar: so(und) na(vigation) (and) r(anging)
– Lidar: li(ght) d(etection) a(and) r(anging)
La detección (o navegación) se refiere a la localización de objetos. Dependiendo de la tecnología, estos objetos pueden estar bajo el agua, en el aire, sobre o bajo el suelo, o incluso en el espacio. El radar, el sonar y el lidar pueden determinar la distancia de un objeto, o su alcance. Para esa medición, el tiempo juega un papel importante.
Lidar, radar y sistemas de sonar incluyen dispositivos de cronometraje. Sus relojes registran el tiempo necesario para que una onda viaje hasta un objeto y vuelva. Cuanto mayor sea la distancia, más tardará el eco en volver.
El radar, el sonar y el lidar también pueden revelar información sobre la forma, el tamaño, el material y la dirección de un objeto. Los controladores aéreos utilizan el radar para detectar aviones en el cielo. La policía lo utiliza para detectar a los conductores. La marina utiliza el sonar para cartografiar el fondo del mar o para buscar submarinos enemigos. Y el lidar ayuda a leer el terreno o las características de la superficie de la Tierra. Los pulsos láser del lidar pueden atravesar la cubierta forestal para registrar la forma del suelo. Esto hace que esta tecnología sea especialmente valiosa para la cartografía.