Introducción a la psicología

Conceptos y prototipos

El sistema nervioso humano es capaz de manejar infinitos flujos de información. Los sentidos sirven de interfaz entre la mente y el entorno externo, recibiendo estímulos y traduciéndolos en impulsos nerviosos que se transmiten al cerebro. A continuación, el cerebro procesa esta información y utiliza los fragmentos pertinentes para crear pensamientos, que luego pueden expresarse mediante el lenguaje o almacenarse en la memoria para su uso futuro. Para hacer este proceso más complejo, el cerebro no recoge la información sólo del entorno externo. Cuando se forman los pensamientos, el cerebro también extrae información de las emociones y los recuerdos (Figura 1). La emoción y la memoria son poderosas influencias tanto en nuestros pensamientos como en nuestros comportamientos.

Figura 1. Las sensaciones y la información son recibidas por nuestro cerebro, filtradas a través de las emociones y los recuerdos, y procesadas para convertirse en pensamientos.

Para organizar esta asombrosa cantidad de información, el cerebro ha desarrollado una especie de archivador en la mente. Los diferentes archivos almacenados en el archivador se llaman conceptos. Los conceptos son categorías o agrupaciones de información lingüística, imágenes, ideas o recuerdos, como experiencias vitales. Los conceptos son, en muchos sentidos, grandes ideas que se generan al observar detalles, y categorizar y combinar estos detalles en estructuras cognitivas. Utilizas los conceptos para ver las relaciones entre los diferentes elementos de tus experiencias y para mantener la información en tu mente organizada y accesible.

Los conceptos son informados por nuestra memoria semántica (aprenderás más sobre este concepto cuando estudies la memoria) y están presentes en todos los aspectos de nuestras vidas; sin embargo, uno de los lugares más fáciles para notar los conceptos es dentro de un aula, donde se discuten explícitamente. Cuando se estudia la historia de los Estados Unidos, por ejemplo, se aprende algo más que los acontecimientos individuales que han sucedido en el pasado del país. Absorbes una gran cantidad de información escuchando y participando en debates, examinando mapas y leyendo relatos de primera mano sobre la vida de las personas. Tu cerebro analiza estos detalles y desarrolla una comprensión global de la historia de Estados Unidos. En el proceso, su cerebro reúne detalles que informan y perfeccionan su comprensión de conceptos relacionados como la democracia, el poder y la libertad.

Los conceptos pueden ser complejos y abstractos, como la justicia, o más concretos, como los tipos de aves. En psicología, por ejemplo, las etapas de desarrollo de Piaget son conceptos abstractos. Algunos conceptos, como la tolerancia, son consensuados por muchas personas, porque se han utilizado de diversas maneras durante muchos años. Otros conceptos, como las características de tu amigo ideal o las tradiciones de cumpleaños de tu familia, son personales e individualizados. De este modo, los conceptos afectan a todos los aspectos de nuestras vidas, desde nuestras numerosas rutinas diarias hasta los principios rectores del funcionamiento de los gobiernos.

Los conceptos son el núcleo del comportamiento inteligente. Esperamos que las personas sean capaces de saber qué hacer en situaciones nuevas y al enfrentarse a objetos nuevos. Si entras en un aula nueva y ves sillas, una pizarra, un proyector y una pantalla, sabes qué son estas cosas y cómo se van a utilizar. Te sientas en una de las sillas y esperas que el profesor escriba en la pizarra o proyecte algo en la pantalla. Lo haces aunque nunca hayas visto ninguno de estos objetos en particular, porque tienes conceptos de las aulas, las sillas, los proyectores, etc., que te dicen lo que son y lo que se supone que debes hacer con ellos. Además, si alguien te dice un dato nuevo sobre el proyector -por ejemplo, que tiene una bombilla halógena- es probable que extiendas este dato a otros proyectores que encuentres. En resumen, los conceptos te permiten extender lo que has aprendido sobre un número limitado de objetos a un conjunto potencialmente infinito de entidades.

Figura 2. En 1930, Mohandas Gandhi lideró un grupo en una protesta pacífica contra un impuesto británico sobre la sal en la India.

Otra técnica utilizada por tu cerebro para organizar la información es la identificación de prototipos para los conceptos que has desarrollado. Un prototipo es el mejor ejemplo o representación de un concepto. Por ejemplo, para la categoría de desobediencia civil, tu prototipo podría ser Rosa Parks. Su resistencia pacífica a la segregación en un autobús urbano en Montgomery, Alabama, es un ejemplo reconocible de desobediencia civil. O su prototipo podría ser Mohandas Gandhi, a veces llamado Mahatma Gandhi («Mahatma» es un título honorífico) (Figura 2).

Mohandas Gandhi actuó como una fuerza no violenta en favor de la independencia de la India, al tiempo que exigía que los líderes budistas, hindúes, musulmanes y cristianos -tanto indios como británicos- colaboraran pacíficamente. Aunque no siempre tuvo éxito a la hora de evitar la violencia a su alrededor, su vida proporciona un ejemplo firme del prototipo de desobediencia civil (Constitutional Rights Foundation, 2013). Al igual que los conceptos pueden ser abstractos o concretos, podemos distinguir entre los conceptos que son funciones de nuestra experiencia directa con el mundo y los que son de naturaleza más artificial.

Pruébalo

Enlace al aprendizaje

Prueba lo bien que puedes acertar el prototipo del ordenador para ciertos objetos jugando a este juego interactivo, Quick Draw!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *