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Varios tipos de desbridamientos pueden lograr la eliminación del tejido desvitalizado. Estos incluyen el desbridamiento quirúrgico, el desbridamiento biológico, los desbridamientos enzimáticos y el desbridamiento autolítico.

Desbridamiento autolítico

Este es el tipo de desbridamiento más conservador. Este tipo de desbridamiento es un proceso natural por el cual las células fagocíticas endógenas y las enzimas proteolíticas rompen el tejido necrótico. Es un proceso altamente selectivo por el que sólo el tejido necrótico se verá afectado en el desbridamiento.

Está indicado para heridas no infectadas. También puede utilizarse como terapia complementaria en heridas infectadas. Puede utilizarse con otras técnicas de desbridamiento como el desbridamiento mecánico en el caso de heridas infectadas.

Requiere un entorno húmedo y un sistema inmunitario funcional. El uso de apósitos retenedores de humedad puede potenciarlo. Este tipo de desbridamiento induce el reblandecimiento del tejido necrótico y la eventual separación del lecho de la herida.

La eficacia de este tipo de desbridamiento está mandatada por la cantidad de tejido desvitalizado que hay que eliminar, así como por el tamaño real de la herida.

El desbridamiento autolítico tardará unos días. Si no se observa una disminución significativa del tejido necrótico en 1 ó 2 días, debe considerarse un método diferente de desbridamiento.

Desbridamiento biológico

El desbridamiento biológico, también conocido como terapia larvaria, utiliza larvas estériles de la especie Lucilia sericata de la mosca verde de la botella. Es un modo eficaz de desbridamiento, especialmente apropiado en heridas grandes en las que se necesita una eliminación indolora del tejido necrótico. El mecanismo de acción de la megaterapia/desbridamiento consiste principalmente en la liberación de enzimas proteolíticas que contienen las secreciones y excreciones que disuelven el tejido necrótico del lecho de la herida. Otros modos de acción que contribuyen al resultado global de la terapia larvaria son:

  1. Bactericida, ya que las larvas ingieren y digieren las bacterias
  2. Inhibir el crecimiento bacteriano produciendo en la liberación de amoníaco en el lecho de la herida que aumenta el pH de la misma
  3. Descomponer de la biopelícula existente en el lecho de la herida e inhibición del crecimiento de nueva biopelícula
  4. Ingesta directa de tejido necrótico
  5. Los Maggot pueden aplicarse en el lecho de la herida. Pueden estar encerrados en una bolsa biológica o estar en libertad.

    Los estudios han demostrado que los gusanos en libertad pueden desbridar una herida al menos dos veces más rápido que los gusanos en bolsa. Los estudios de comparación del tratamiento con gusanos de granja frente a los gusanos contenidos en bolsas biológicas frente al desbridamiento autolítico con hidrogel muestran que los días para el desbridamiento completo son 14 frente a 28 frente a 72 días respectivamente.

    Las contraindicaciones para el desbridamiento biológico son una herida abdominal contigua a la cavidad intraperitoneal, el pioderma gangrenoso en pacientes con terapia de inmunosupresión y las heridas en proximidad a zonas afectadas por artritis séptica.

    Desbridamiento enzimático

    Se trata de un método selectivo de desbridamiento del tejido necrótico que utiliza una enzima proteolítica exógena, la colagenasa, para desbridar las bacterias Clostridium. La colagenasa digiere el colágeno del tejido necrótico permitiendo que se desprenda.

    El desbridamiento enzimático es un método lento del desbridamiento a partir del pelo al desbridamiento mecánico y cortante.

    La colagenasa y los apósitos retenedores de humedad pueden trabajar en sinergia mejorando el desbridamiento.

    El desbridamiento enzimático no se recomienda para un proceso avanzado, o en pacientes con sensibilidad conocida a los ingredientes del producto.

    Una contraindicación relativa del desbridamiento enzimático es su uso en heridas muy infectadas. Además, la colagenasa no debe utilizarse junto con productos a base de plata o con la solución de Dakin.

    Desbridamiento quirúrgico con instrumentos afilados

    Es un tipo de desbridamiento en el que se elimina el tejido desvitalizado (escoria, necrótico o escara) en presencia de una infección subyacente utilizando instrumentos afilados como un bisturí, Metzenbaum, curetas, entre otros. Esto puede hacerse a pie de cama, en la consulta o en el centro de atención de heridas, o en el quirófano, dependiendo de la idoneidad de la anestesia y de la capacidad de controlar las complicaciones perioperatorias, como la hemorragia. El profesional sanitario debe estar capacitado y entrenado y estar cualificado y licenciado para proporcionar tratamiento quirúrgico.

    El desbridamiento con instrumentos afilados puede combinarse con todos los demás métodos de desbridamiento durante el periodo perioperatorio.

    Las desventajas del desbridamiento quirúrgico incluyen acontecimientos adversos del propio desbridamiento, por ejemplo, hemorragias y posibles complicaciones generales de la anestesia.

    Las contraindicaciones del desbridamiento quirúrgico en el quirófano tendrían que tener en cuenta la estratificación de riesgo quirúrgico particular del paciente. El desbridamiento quirúrgico brusco está contraindicado en pacientes con una escara intacta y sin evidencia clínica de una infección subyacente porque en estos casos, la escara intacta funciona como una cubierta biológica para el defecto cutáneo subyacente. Esto suele verse en lesiones por presión no evolutivas en el sacro o las nalgas o los talones con escaras intactas y/o secas.

    Desbridamiento mecánico

    El desbridamiento mecánico es un tipo de desbridamiento no selectivo, lo que significa que eliminará tanto el tejido desvitalizado y los restos como el tejido viable. Suele llevarse a cabo mediante fuerza mecánica: húmedo-seco, lavado pulsátil o irrigación de la herida.

    Está indicado para heridas tanto agudas como crónicas con cantidades moderadas o grandes de tejido necrótico, independientemente de la presencia de una infección activa.

    Las contraindicaciones incluyen, dependiendo de la modalidad de desbridamiento mecánico utilizada, la presencia de tejido de granulación en mayor cantidad que el tejido desvitalizado, la incapacidad de controlar el dolor, los pacientes con mala perfusión y una escara intacta sin evidencia clínica bruta de una infección subyacente.

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