Drogas, pastillas y bulimia
McCormick luchó durante años con problemas corporales y de bulimia que empezaron en su adolescencia y acabaron por llevarla a un camino de autodestrucción. Tras el final de la serie La tribu de los Brady, a McCormick le resultó imposible deshacerse de su imagen de niña buena y le resultó difícil conseguir papeles de actriz. Hizo apariciones como invitada en los programas de televisión Las calles de San Francisco, El barco del amor, Vega$, Días felices, Donny & Marie y La isla de la fantasía, junto con papeles secundarios en una serie de películas de serie B.
Maureen McCormick
Foto: Alberto E. Rodríguez/Getty Images
Después de ser rechazada para un papel más serio en la película Midnight Express, protagonizada por Brad Davis, consiguió un papel en Take Down en 1979, pero para entonces ya frecuentaba los antros de cocaína de Hollywood, haciéndose adicta a las drogas y las pastillas. Una vez admitió haber salido con el actor Steve Martin mientras estaba «frita». Los dos tuvieron una sola cita. Durante la producción de Las novias Brady, el agente de McCormick la encontró en su armario, drogada con cocaína, después de faltar tres días a la producción.
«Era tan adicta a la cocaína que casi me destruye», dijo McCormick en una entrevista con Access Hollywood. «Se convirtió en mi todo»
Matrimonio y rehabilitación
McCormick se casó con el actor Michael Cummings el 16 de marzo de 1985. Su hija, Natalie Michelle, nació el 19 de mayo de 1989.
Después de casarse con Cummings, McCormick se enfrentó de lleno a su depresión y a sus adicciones. Estuvo varias veces en rehabilitación y se adentró en la terapia experimental, que resultó exitosa. Ella y su familia se establecieron en Westlake, California.
Carrera posterior
Además de publicar un álbum de música country, When You Get a Little Lonely, de 1995, McCormick siguió apareciendo en películas y programas de televisión. En particular, se unió al grupo de concursantes de la quinta temporada del programa Celebrity Fit Club de VH1 en 2007, y acabó ganando el concurso en pantalla. Esta experiencia la llevó a establecer la conexión entre su aumento de peso y la depresión, y abordó públicamente sus problemas de salud mental y de drogas.
En 2016, McCormick compitió en la temporada 23 de Dancing With the Stars, quedando en octavo lugar.
En 2019, participó en A Very Brady Renovation, un spinoff del popular programa de renovación de casas Property Brothers de HGTV que reunió a McCormick con muchos de sus antiguos compañeros de reparto para un proyecto de recreación de su casa de la televisión.