Ahora que estamos bien metidos en la pandemia de COVID-19, los pasos que debemos dar para controlar eficazmente el brote han quedado claros: Medidas de prevención concienzudas como el uso de mascarillas, el lavado de manos y el distanciamiento; pruebas generalizadas con tiempos de respuesta rápidos; y el rastreo de contactos para las personas que den positivo en las pruebas para ayudar a detener la propagación. Combinadas, estas son nuestras mejores apuestas mientras esperamos mejores tratamientos y una vacunación generalizada.
Entonces, ¿qué pruebas utilizar?
Comience por aquí: Hay pruebas que diagnostican la infección actual y pruebas que muestran si usted ha tenido previamente SARS-CoV-2, el virus que causa COVID-19.
La FDA ha concedido la autorización de uso de emergencia (EUA) para cientos de pruebas de diagnóstico de COVID-19. Esto permite a los fabricantes comercializar las pruebas sin recibir la aprobación formal de la FDA debido a que existe una emergencia de salud pública.
Debido a que este nuevo coronavirus es realmente novedoso, y a que la COVID-19 es una enfermedad nueva, la información sobre las pruebas disponibles es incompleta y las opciones de pruebas siguen cambiando. Las pruebas varían en términos de precisión, coste, uso recomendado para personas de distintas edades y conveniencia. Esta entrada del blog revisa las características de los principales tipos de pruebas. Para obtener información más detallada sobre las pruebas individuales, consulte la lista actualizada de pruebas autorizadas de la FDA, que tiene enlaces a los sitios web de los fabricantes de las pruebas.
Pruebas de diagnóstico de la infección actual
Si quiere saber si tiene o no el virus, hay dos tipos de pruebas: pruebas moleculares y pruebas de antígenos.
Pruebas moleculares (también llamadas pruebas de PCR, pruebas de ARN viral, pruebas de ácidos nucleicos)
¿Cómo se hace? Hisopos nasales, hisopos de garganta y pruebas de saliva u otros fluidos corporales.
¿Dónde puede hacerse esta prueba? En un hospital, en una consulta médica, en el coche o incluso en casa. La FDA ha autorizado una prueba molecular casera que no requiere receta médica.
¿Qué busca la prueba? Las pruebas moleculares buscan material genético que proviene únicamente del virus.
¿Cuánto tiempo se tarda en obtener los resultados? Depende de la capacidad del laboratorio. Los resultados pueden estar listos en cuestión de horas, pero suelen tardar al menos uno o dos días. En muchos lugares se informa de tiempos de entrega mucho más largos.
¿Y la precisión? La tasa de falsos negativos -una prueba que dice que no se tiene el virus cuando en realidad se tiene- varía en función del tiempo en que se haya producido la infección: en un estudio, la tasa de falsos negativos fue del 20% cuando la prueba se realizó cinco días después del inicio de los síntomas, pero mucho más alta (hasta el 100%) en una fase más temprana de la infección.
La tasa de falsos positivos -es decir, la frecuencia con la que la prueba dice que se tiene el virus cuando en realidad no se tiene- debería ser cercana a cero. Se cree que la mayoría de los resultados falsos positivos se deben a la contaminación del laboratorio o a otros problemas relacionados con la forma en que el laboratorio ha realizado la prueba, y no a las limitaciones de la prueba en sí.
Una prueba molecular que utilice un hisopo nasal suele ser la mejor opción, porque tendrá menos resultados falsos negativos que otras pruebas de diagnóstico o muestras de hisopos de garganta o saliva. Sin embargo, a las personas que están en el hospital se les puede tomar otro tipo de muestras.
Pruebas de antígenos
¿Cómo se hace? Con un hisopo nasal o de garganta.
¿Dónde se pueden hacer estas pruebas? En un hospital, en la consulta del médico o en casa (la FDA ha autorizado una prueba de antígenos casera que no requiere receta).
¿Qué busca la prueba? Esta prueba identifica fragmentos de proteínas (antígenos) del virus.
¿Cuánto tiempo se tarda en obtener los resultados? La tecnología implicada es similar a la de una prueba de embarazo o una prueba rápida de estreptococos, con resultados disponibles en minutos.
¿Qué hay de la precisión? Los resultados falsos negativos tienden a producirse con más frecuencia con las pruebas de antígenos que con las pruebas moleculares. Por ello, las pruebas de antígenos no están favorecidas por la FDA como prueba única para la infección activa. Dado que las pruebas de antígenos son más rápidas, menos costosas y requieren una tecnología menos compleja que las pruebas moleculares, algunos expertos recomiendan repetir las pruebas de antígenos como una estrategia razonable. Al igual que con la prueba molecular, la tasa de falsos positivos de las pruebas de antígenos debería ser cercana a cero.
Pruebas para detectar infecciones pasadas
Una prueba de anticuerpos puede mostrar si se ha infectado previamente con el virus COVID-19.
Pruebas de anticuerpos (también llamadas pruebas serológicas)
¿Cómo se hace? Se toma una muestra de sangre.
¿Dónde se pueden hacer estas pruebas? En la consulta del médico, en un laboratorio de análisis de sangre o en un hospital.
¿Qué busca la prueba? Estos análisis de sangre identifican los anticuerpos que el sistema inmunitario del cuerpo ha producido en respuesta a la infección. Aunque una prueba serológica no puede decirle si tiene una infección ahora, puede identificar con precisión una infección pasada.
¿Cuánto tiempo se tarda en obtener los resultados? Los resultados suelen estar disponibles en unos pocos días.
¿Y la precisión? Hacerse una prueba de anticuerpos demasiado pronto puede dar lugar a resultados falsos negativos. Esto se debe a que el sistema inmunitario tarda una o dos semanas después de la infección en producir anticuerpos. La tasa de falsos negativos registrada es del 20%. Sin embargo, el rango de falsos negativos oscila entre el 0% y el 30%, dependiendo del estudio y del momento en que se realice la prueba en el curso de la infección.
Las investigaciones sugieren que los niveles de anticuerpos pueden disminuir en tan sólo unos meses. Y aunque una prueba de anticuerpos positiva demuestra que se ha estado expuesto al virus, aún no se sabe si tales resultados indican una falta de contagio o una inmunidad protectora de larga duración.
La verdadera precisión de las pruebas de COVID-19 es incierta
Desgraciadamente, no está claro exactamente la precisión de ninguna de estas pruebas. Hay varias razones para esto:
- No tenemos medidas precisas de la exactitud de estas pruebas – sólo algunas cifras comúnmente citadas para falsos negativos o falsos positivos, como los reportados anteriormente. Las pruebas falsas negativas proporcionan una falsa tranquilidad, y podrían llevar a retrasar el tratamiento y a relajar las restricciones a pesar de ser contagioso. Los falsos positivos, que son mucho menos probables, pueden causar una ansiedad injustificada y obligar a la gente a ponerse en cuarentena innecesariamente.
- El cuidado con el que se recoge y almacena una muestra puede afectar a la precisión.
- Debido a que estas pruebas están disponibles a través de la AEU, aún no se han llevado a cabo las rigurosas pruebas habituales y los resultados de precisión no se han publicado ampliamente.
- Un gran y creciente número de laboratorios y empresas ofrecen estas pruebas, por lo que la precisión puede variar.
- Todas estas pruebas son nuevas porque el virus es nuevo. Sin un largo historial, las evaluaciones de la precisión sólo pueden ser aproximadas.
- No tenemos una prueba «estándar de oro» definitiva con la que compararlas.
¿Cuánto cuestan las pruebas?
El coste varía mucho, desde menos de 10 dólares hasta cientos de dólares, dependiendo de si su seguro médico cubre la prueba, o si usted pagará de su bolsillo. También depende de la prueba que se haga y del lugar en el que se realice.
Es importante preguntar por el coste con antelación, especialmente si le dicen que vaya a urgencias o a un centro de pruebas privado. Algunas comunidades ofrecen pruebas gratuitas. Consulte en Internet o llame al gobierno de su ciudad para informarse.
La conclusión
Si tuviéramos pruebas caseras rápidas, muy precisas y baratas, podríamos hacernos la prueba repetidamente antes de ir a trabajar, ir a la escuela o pasar tiempo cerca de otras personas. Si las pruebas fueran más precisas, podríamos confiar en ellas para saber cuándo es seguro relajar el distanciamiento, el enmascaramiento y otras medidas de protección. Pero todavía no hemos llegado a ese punto.
Aunque tenemos la suerte de disponer de pruebas razonablemente precisas tan pronto en el curso de un virus recién identificado, necesitamos mejores pruebas y un fácil acceso a ellas. Todas las pruebas deberían someterse a un riguroso examen por parte de la FDA lo antes posible. Lo ideal sería que estuvieran cubiertas por el seguro médico o que se ofrecieran gratuitamente a quienes no tienen seguro. Por último, unas pruebas ampliamente disponibles y unos tiempos de respuesta cortos para los resultados son esenciales para el rastreo eficaz de los contactos y para tener este virus bajo control mientras se espera la vacunación generalizada.
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