Los frutos secos son el alimento frugal por excelencia. Son ricos en proteínas y grasas saludables para el corazón, se pueden encontrar y cosechar de forma gratuita y convierten las recetas más sencillas en una delicia gourmet. Pero si los frutos secos no se almacenan adecuadamente, pueden ponerse rancios rápidamente, ¡y eso no es nada frugal! Repasemos cómo se deben almacenar los frutos secos, para que no se desperdicie ninguno.
Preparación de los frutos secos cultivados en casa o recolectados para su almacenamiento
Colectar tus propios frutos secos es una gran manera de ahorrar dinero, pero tendrás que tomar un par de medidas adicionales para que tus frutos secos estén listos para su almacenamiento. Lo primero en la agenda: asegurarse de que sus nueces están secas. Después de estar al aire libre (y pasar tiempo en el suelo), es probable que tengan algo de humedad extra acumulada, y necesitas deshacerte de ella, para que no se enmohezcan.
Esto es bastante fácil de hacer. Una vez que haya quitado las cáscaras de sus nueces, extiéndalas en un área sombreada con buena circulación de aire, y déjelas secar durante varios días. Un porche con mosquitera es un lugar ideal porque ofrece protección contra las ardillas y otros animales que podrían intentar hacerse con tu botín.
Cuando tus nueces estén secas, mételas en el congelador durante 48 horas para matar los bichos/huevos que pueda haber en su interior. Puede sonar asqueroso, pero las nueces de la tienda de comestibles también tienen que ser tratadas contra los insectos. Después de realizar estos pasos, tus frutos secos pueden ser almacenados de la misma manera que los producidos comercialmente. Veamos ese proceso.
La forma correcta de almacenar los frutos secos
Los frutos secos se pueden almacenar con o sin cáscara. Durarán más si los almacena con cáscara, pero serán más fáciles de agarrar y usar si los descascara primero. Así que es una cuestión de preferencia personal. En cualquier caso, es importante guardar los frutos secos en un recipiente hermético para que mantengan el nivel de humedad adecuado. Incluso una bolsa de plástico para el congelador servirá.
Para preservar la calidad de tus frutos secos, mantenlos alejados de las cebollas y otros alimentos con mucho olor. Tienden a tomar el olor de las cosas que los rodean. Guarde los frutos secos sin cáscara a temperatura ambiente durante un máximo de tres meses. Guarde los frutos secos con o sin cáscara en el frigorífico hasta seis meses, o en el congelador durante un año o más. Etiquete sus paquetes de frutos secos con la fecha en que se almacenaron, para saber cuáles usar primero.
Si sus frutos secos empiezan a saber a rancio, simplemente tuéstelos en un horno a 350 grados durante 10 minutos. Eso les devolverá el sabor. Eso sí, no esperes que mejore los frutos secos rancios. Una vez que los aceites de los frutos secos se estropean, no hay remedio. Pero mientras sigas estos consejos de almacenamiento, eso no debería ser un problema con el que tengas que lidiar nunca.
Una palabra sobre las castañas
Las castañas no son tan estables como otras variedades de frutos secos y deben ser manejadas de manera diferente. No es necesario secarlas, pero sí congelarlas.