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- ¿Qué es la logopedia?
- ¿Cómo saber si tu hijo necesita logopedia?
- Consejos para los padres sobre la logopedia en casa
- Actividades y ejercicios de logopedia
- Actividades según la edad para el desarrollo del habla
- La articulación y la fluidez para formar sonidos, palabras y frases. Los niños afectados por problemas de lenguaje no son buenos para articular palabras y hablar con fluidez. La logopedia pretende trabajar esta dificultad para ayudar a articular mejor las palabras.
- Regulación del volumen del habla. A menudo los niños con problemas de habla hablan con un volumen bajo o alto. La logopedia se centra en ayudar a los niños a articular las palabras con claridad y a regular el tono y el volumen.
- Lenguaje expresivo a través de dibujos, signos y formas escritas. A los niños que sufren trastornos del habla les resulta difícil transmitir un mensaje a los demás utilizando palabras, frases y escritos. También les cuesta utilizar la gramática correctamente y enmarcar las palabras en una frase y describir incidentes. La logopedia tiene como objetivo trabajar estas áreas.
- Las personas tienen dificultades para entender lo que dice su hijo ya que el habla no es clara.
- Su hijo tiene dificultades para pronunciar palabras o traducir sus pensamientos en palabras.
- El habla del niño está alterada con tartamudeo, repetición, prolongación y bloqueos.
- El niño sólo pronuncia una o dos palabras como mamá, papá en lugar de frases de dos o tres palabras.
- Su hijo no ha desarrollado las habilidades sociales como hacer amigos, tener contacto directo, aprender habilidades de juego y relacionarse con los demás.
- Aliente la conversación: Pregúntele a su hijo cosas que le hagan reflexionar como: «¿Qué harías si tuvieras un pájaro como amigo?». Al hacer preguntas que susciten respuestas detalladas, estará animando a su hijo a expresar sus ideas.
- Escuche con atención. Escuche a su hijo con atención, incluso si se toma su tiempo para completar sus frases. Cuando usted escucha, su hijo adquiere la confianza necesaria para hablar. Se esfuerza por hablar con fluidez.
- Puede probar este ejercicio: Reúne a tu hijo y a sus amigos o hermanos y haced un círculo. Susurra una frase a un niño, y éste se la pasará al otro y así sucesivamente. Al final, la frase anunciada por el último niño debe ser la misma que le dijiste al primero.
- Haz que tu hijo lea: Compra algunos libros de cuentos interesantes o coge una noticia que sea de interés para tu hijo y pídele que la lea en voz alta. Dígale que lo repita dos o tres veces. Este tipo de actividades fomentan la expresión oral y las habilidades lingüísticas.
- Haga una evaluación: Evalúe a su hijo y vea en qué áreas está retrasado. Esto le ayudará a saber si los problemas del habla son independientes o están relacionados con otros problemas de desarrollo. Puede analizar comparando el rendimiento de su hijo con los hitos normales en los niños de esa edad.
- Abordar áreas: Elija áreas problemáticas específicas que desee abordar y resolver. Mantenga los objetivos alcanzables tanto para usted como para su hijo. Céntrese en los objetivos específicos de la edad que los niños de esa edad suelen alcanzar.
- Aborde un sonido a la vez: Empiece por dividir un problema en versiones más sencillas y pequeñas y luego enséñelas específicamente.
- Diga «ooo» y luego «eee». Combina «oo-ee». Todos estos enunciados tienen diferentes patrones de movimiento.
- Pídale al niño que sonría mucho, que se relaje y que repita.
- El niño puede hinchar las mejillas mientras no abre los labios. Alternativamente, pueden hinchar una mejilla y descansar la otra.
- Pídale al niño que sople un globo o un silbato.
- Se puede hacer lo mismo con los labios. Hinchar el labio superior y luego el inferior. Relájese. Repita.
- Haga que el niño beba con una pajita en lugar de un vaso.
- Haga que su hijo practique sonidos con la punta de la lengua como «t-t-t-t», «d-d-d-d» «p-p-p-p».
- Diga «go» con exageración
- Haga que su hijo sostenga la lengua y no la apoye sobre los labios o los dientes. Tienen que apretar la lengua y luego relajarla.
- Pide al niño que saque la lengua y haga movimientos circulares.
- Pide a tu hijo que mantenga los labios sellados y contraiga las mejillas.
- Haz una «o» con los labios y muévelos de forma circular. Relaja y repite.
- Usa una pajita para beber agua.
- Haz sonidos como «ma», «ba», «da». Con el tiempo, su bebé podría repetirlos.
- Pretenda mantener una conversación con su bebé cada vez que emita sonidos. Habla con él y repite lo que diga. Esto le anima a «hablar» más.
- Enseñe a su bebé a dar palmas.
- Hable con su bebé mientras lo baña, pasea o alimenta. Puedes hablar de cualquier cosa.
- Usa gestos como saludar y señalar.
- Habla a tu bebé sobre los sonidos de los animales, como «El perro dice bow-wow».
- Usa las vocales en las palabras.
- Habla con claridad para que el niño aprenda eso de ti.
- Repite lo que tu hijo habla para decirle que lo entiendes.
- Aumenta lo que dice. Ejemplo: «¿Jugo de mango? Tengo zumo. Tengo zumo de mango. Quieres zumo de mango?».
- Ayuda a tu hijo a entender y hacer preguntas. Juegue al juego del sí/no. Puede hacer que inventen frases como: «Puedo volar», «Un árbol puede caminar», y luego responda con un sí o un no.
- Ponga objetos conocidos en una caja. Haz que tu hijo saque uno a la vez y te diga cómo se llama y cómo se usa. «Esto es un lápiz. Yo uso un lápiz para dibujar. También escribo usando este lápiz».
- Pídale al niño que lea en voz alta pronunciando lentamente cada palabra por separado.
Algunos niños pueden hablar, pero las palabras no fluyen con fluidez. No pueden expresar sus pensamientos en una frase completa ya que las palabras o las sílabas se rompen. Puede que no haya claridad en su discurso o que haya tartamudeo.
Tales problemas vienen a ser una barrera para la comunicación de un niño, y podrían, en algunos casos, hacer que el niño tenga menos confianza en sí mismo.
Estos problemas pueden ser tratados a través de la terapia del habla. En este post, MomJunction te habla de la logopedia para niños y comparte algunos juegos y actividades que puedes retomar en casa.
¿Qué es la logopedia?
La logopedia es un método de intervención del lenguaje que se centra en mejorar el habla del niño, su capacidad de discernimiento y superar problemas como la mala articulación, la disfluencia (repetición de un sonido, palabra o frase) y los trastornos fonológicos y de la voz.
Ayuda al niño a expresarse mejor a través del lenguaje verbal y no verbal. Se centra en:
En general, los niños son reacios a hablar o a hablar con pausas. Es difícil entender lo que quieren decir. Pero esto no significa que el niño necesite una terapia.
¿Cómo saber si tu hijo necesita logopedia?
Hay que entender los niveles del problema cuando la logopedia se hace necesaria. Estos son algunos criterios (1):
1. Su hijo necesita terapia del habla si:
2. Su hijo puede tener una pronunciación perfecta y también puede ser un lector precoz. Pero aún puede necesitar logopedia para perfeccionar sus habilidades de lenguaje pragmático o el proceso de utilizar el lenguaje de forma adecuada en escenarios sociales para tener una conversación, hacer nuevos amigos o simples peticiones a alguien.
3. Un niño también puede necesitar terapia del habla debido a discapacidades, o condiciones médicas como el autismo o la discapacidad auditiva, ya que afectan a la capacidad de comunicación.
Consulte a un patólogo del habla (SLP) en los casos anteriores. Los SLP suelen comenzar los servicios para estos niños a una edad temprana y continúan durante los años escolares.
Aunque su hijo esté inscrito en un servicio de logopedia, puede practicar ejercicios de logopedia en casa para apoyar el tratamiento.
Si el habla, se retrasa entonces lo primero que hay que considerar es si la audición del niño está bien. Esto se puede evaluar en casa para ver si el niño responde a los sonidos fuertes o se vuelve hacia la música o el sonido de la televisión.
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Consejos para los padres sobre la logopedia en casa
Una de las cosas más importantes que hay que hacer es evitar cualquier comentario negativo sobre el habla de su hijo. Si su hijo es tartamudo, no lo presione. En su lugar, siga los siguientes consejos:
Si quiere enseñar a su hijo a utilizar correctamente el sonido f, empiece por mostrarle cómo pronunciar el sonido primero (fff), luego enséñele las sílabas (fuh/ oof), después pase a las palabras (f de pez) y, por último, utilice esas palabras en las frases y la conversación.
Puede probar varias actividades para mejorar el habla de su hijo. Pero recuerde que su hijo debe disfrutar de ellas. Puede que no coopere si se siente aburrido.
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Actividades y ejercicios de logopedia
Cada uno de los ejercicios que compartimos a continuación involucra al niño y estimula la producción del habla.
Fichas y tarjetas de preguntas
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Coloque unas cuantas tarjetas con imágenes delante de su hijo y pídale que diga lo que ve en la tarjeta. Empieza con unas pocas tarjetas y ve aumentando las imágenes a medida que vayas avanzando. Si su hijo tiene dificultades con ciertas palabras, entenderá dónde debe invertir más tiempo.
Las tarjetas de preguntas tienen preguntas sencillas para los niños. Escoge una tarjeta cada vez y baja el ritmo para tener una conversación. Esta puede ser una gran estrategia para arrastrar a su hijo a una conversación.
Las preguntas pueden ser como: «Si tuvieras que recibir un regalo ahora mismo, ¿cuál sería?»/ «Si pudieras cambiar una cosa del colegio, ¿qué sería?»
Ejercicio del espejo
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Los espejos proporcionan información visual. La mayoría de los niños con problemas de articulación no saben cómo mover la boca para formar los sonidos con precisión. Hablar delante de un espejo ayuda al niño a observar cómo mueve la boca al emitir ese sonido concreto.
Póngase delante del espejo y produzca cada sonido para su hijo. Luego, ayúdale a discernir las diferencias a través del espejo.
Salta y habla
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Este juego hace que tu hijo repita la palabra nueve veces. Comienza con las palabras que quieres que tu hijo practique.
Dibuja una rayuela con números del 1 al 9 y pídele al niño que pronuncie la palabra cada vez que salte sobre un número. Una vez que completen los saltos hasta el 9, cambia la palabra y deja que vuelvan a saltar, esta vez con la nueva palabra.
Puedes empezar con menos palabras y aumentarlas gradualmente.
Una vez que completen el juego diciendo las palabras correctamente, recompénsalo con un regalo. Esto aumenta la confianza del niño.
Juega a la pelota
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Coge una pelota y lánzala de un lado a otro. Juega a atraparla con tu hijo mientras practica sus palabras. Así estarán haciendo dos ejercicios a la vez.
Salid a pasear
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Si estás caminando en algún lugar con tu hijo, haz que dé un paso adelante por cada repetición correcta. Puedes probar esto cuando estés en un parque o entrando en tu casa.
Además de realizar este tipo de juegos con tu hijo, tienes que hacer que ejercite sus músculos orales.
Ejercicios de motricidad oral
La motricidad oral se refiere al uso de los músculos del interior de la boca, incluyendo los labios, las mejillas, la mandíbula y la lengua. Todas estas partes están ligadas a los músculos, que pueden ser fuertes o débiles, coordinados o descoordinados.
Necesitamos una fuerte motricidad oral para poder hablar, comer, tragar o beber. Aquí tienes diferentes ejercicios de motricidad oral para que tus hijos practiquen en la comodidad del hogar.
Movimientos de labios
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Estos movimientos labiales constituyen un excelente ejercicio oral para los niños.
Movimientos de la lengua
Prueba estos ‘trabalenguas’.
Movimientos de las mejillas
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Puedes fortalecer los músculos de las mejillas del niño con estos movimientos:
Otros ejercicios para la motricidad oral:
Soplar burbujas
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Deja que tu hijo sople burbujas para controlar la respiración y también los labios. Hace que los niños frunzan los labios, lo que supone un ejercicio de motricidad oral.
Afinar la armónica
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Soplar la armónica ayuda a controlar la respiración y a fruncir los labios. Si el control de la respiración de tu hijo es débil, haz que emita sonidos más fuertes con la armónica, y si su fuerza labial es débil, céntrate en tocar una nota cada vez.
Mantequilla de cacahuete
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¿A quién no le gusta la mantequilla de cacahuete? Frota un poco en los labios del niño y haz que lo lama. Aplica la mantequilla de una esquina a otra para que la lengua llegue de un lado a otro.
Además de estas actividades, puedes animar a tu hijo a hablar y desarrollar su habla con actividades sencillas desde su infancia.
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Actividades para el desarrollo del habla en función de la edad
Aquí tienes algunas actividades que puedes probar en casa.
Recuerda que los niños aprenden a hablar de forma natural y, por tanto, no debes presionarlos. Estas actividades pueden llevarse a cabo sólo si al niño le gustan. No se debe forzar al niño a realizar estas actividades.
Desde el nacimiento hasta los 2 años
A esta edad, el bebé no puede hablar pero emite algunos sonidos. De ahí que no se pueda saber si necesita alguna terapia de lenguaje. Puedes realizar los siguientes ejercicios si quieres animar a tu bebé a emitir sonidos o sílabas.
De 2 a 4 años
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También puede utilizar juguetes para el desarrollo del habla y libros de logopedia.
No tenga prisa por empezar la logopedia de su hijo. Dale tiempo para que mejore sus habilidades de habla. Debe ser paciente y positivo mientras ayuda a su hijo a aprender a hablar. Los niños se benefician más cuando sus padres empatizan con ellos.