Rolling Stone

  • por

«Lo que le falta a la música pop es el peligro», dijo Prince en una entrevista con The Guardian en 2006. «No hay emoción ni misterio». El peligro, la emoción y el misterio fueron las cartas de presentación de Prince Rogers Nelson desde el primer día. A la precoz edad de 19 años, publicó su álbum de debut, For You, de 1978. A partir de ahí, utilizó su plataforma como intérprete escandalosamente vestido y descaradamente sexy (que resultaba ser un músico virtuoso y un genio innovador en el estudio) para crear algunos de los éxitos más tabúes y musicalmente más avanzados que han irrumpido en la corriente principal.

Desde su cúspide crítica y comercial de 1984, Purple Rain, hasta su reciente gira Piano and a Microphone, Prince nunca se quedó quieto. Su picardía era legendaria, pero su cuerpo de trabajo habla profundamente de la profundidad, sinceridad y sensibilidad de uno de los maestros más enigmáticos del pop. Claro que no le costaba agitar los titulares cada pocos meses con alguna maniobra críptica o escandalosa, que no hacía sino añadir otra capa a su volátil mística. Pero lo que realmente conmovía al mundo era su música, canciones que nos conmovían emocional, sensorial, intelectualmente o simplemente como locomotoras. Aquí, solo una muestra de algunas de sus mejores.

Esta lista fue publicada originalmente en abril de 2016.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *