Cáncer de columna: Visión general del Instituto del Cáncer

¿Qué son los tumores de la columna vertebral?

Los tumores de la columna vertebral son un grupo diverso de lesiones que van desde los tumores benignos (no cancerosos) tratados con resección quirúrgica, hasta los tumores malignos (cancerosos) que requieren una atención multidisciplinar que incluye cirugía, radioterapia y/o quimioterapia.

Los tumores benignos de la columna vertebral incluyen meningiomas, neurofibromas y schwannomas. Estos tumores suelen aparecer dentro del canal espinal, pero fuera de la médula espinal. Estos tumores se tratan con mayor frecuencia sólo con resección quirúrgica, aunque los casos más complejos pueden requerir también una terapia adicional como radiación o quimioterapia.

Los tumores espinales malignos de la columna vertebral pueden dividirse en dos categorías: los raros tumores primarios, que surgen en los huesos de la columna vertebral, como los osteosarcomas, los cordomas y los sarcomas de células gigantes; y los tumores secundarios, o metastásicos, más comunes.

Los tumores metastásicos de la columna vertebral se producen cuando las células cancerosas de otra parte del cuerpo procedentes de cánceres como el de pulmón, mama, próstata y colon se extienden a la columna vertebral, ya sea por extensión directa o a través del torrente sanguíneo. Los tumores de este tipo suelen necesitar un enfoque multidisciplinar agresivo, que posiblemente incluya cirugía, reconstrucción de la columna vertebral, radioterapia, radiocirugía estereotáctica y/o quimioterapia. Es necesario el tratamiento de un cirujano oncológico espinal experimentado para obtener resultados óptimos si se requiere la cirugía.

Tumores de la médula espinal

Los tumores primarios de la médula espinal son aquellos que se originan en la propia médula espinal. Entre ellos se encuentran los astrocitomas, glioblastomas, ependimomas y hemangioblastomas. La diferenciación de las lesiones inflamatorias o desmielinizantes de la columna vertebral de los tumores de la médula espinal puede ser difícil.

Por esta razón, la cirugía debe aconsejarse sólo después de una evaluación exhaustiva. Para los casos seleccionados, la resección microquirúrgica con un cirujano neurooncológico experimentado limitará los problemas neurológicos (morbilidad), mejorará la posibilidad de curación de los tumores menos agresivos (hemangioblastoma y ependimoma), y potencialmente mejorará la supervivencia de los más agresivos (astrocitoma y glioblastoma).

Los tumores agresivos de la médula espinal suelen requerir el enfoque multidisciplinar de los radioterapeutas y oncólogos del Instituto de Tumores Cerebrales de la Clínica Cleveland para lograr un control a largo plazo.

¿Cuáles son los síntomas?

Los síntomas de los tumores de la columna vertebral y de la médula espinal dependen de la ubicación en la columna y de los nervios que estén afectados. Muchos de estos tumores presentan como síntomas iniciales dolor de espalda o de piernas. Otros pueden presentarse con debilidad en las piernas o los brazos, torpeza o problemas en los intestinos o la vejiga.

¿Cómo se diagnostican?

El TAC (tomografía computarizada) o la RMN (resonancia magnética) se utilizan con mayor frecuencia en la evaluación inicial de los tumores de la columna vertebral y la médula espinal.

¿Cuáles son las opciones de tratamiento para los tumores de la columna vertebral?

El Instituto de Tumores Cerebrales de la Clínica Cleveland trata de forma agresiva los tumores primarios y metastásicos de la columna vertebral y la médula espinal. Los neurocirujanos utilizan ultrasonidos, microcirugía y cirugía láser durante la extirpación de los tumores; las técnicas de fusión y estabilización más modernas, como la vertebroplastia y la corpectomía, ayudan a restablecer la movilidad funcional y a aliviar el dolor.

El dolor que no es susceptible de abordaje quirúrgico directo puede tratarse con bloqueos nerviosos y catéteres que suministran medicamentos directamente a la columna vertebral. Cuando estas técnicas fracasan, las técnicas quirúrgicas, incluidas las bombas intratecales y la cordotomía, suelen proporcionar un alivio drástico del dolor a los pacientes con tumores espinales.

La radiación y la quimioterapia suelen desempeñar un papel en el tratamiento integral de las lesiones malignas de la columna vertebral. Las opciones de radiación pueden incluir la radioterapia fraccionada estándar y la radiocirugía conformada con el sistema radioquirúrgico Novalis.

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