Los médicos del NYU Langone son expertos en el diagnóstico de la estenosis de la arteria renal. Esta afección es el resultado de un estrechamiento de una o ambas arterias renales, los vasos sanguíneos que conducen a los riñones. Al disminuir el flujo sanguíneo, los riñones no pueden funcionar correctamente. También puede hacer que los riñones produzcan una sustancia química llamada renina, que eleva la presión arterial.
Los riñones son un par de órganos con forma de judía situados a ambos lados de la parte baja de la espalda. Su función es filtrar y eliminar los residuos de la sangre, ayudar a controlar la presión arterial y regular los electrolitos, que son minerales que conducen los impulsos eléctricos en el cuerpo.
Típicamente, la estenosis de la arteria renal se desarrolla como resultado de la aterosclerosis, que se produce cuando la placa, una sustancia cerosa compuesta de colesterol, grasa y calcio, se acumula en las arterias. Entre los factores de riesgo se encuentran una dieta rica en grasas, un estilo de vida sedentario, el tabaquismo y los antecedentes familiares de la enfermedad.
Menos comúnmente, la estenosis de la arteria renal puede ser causada por la displasia fibromuscular, una condición en la que muchas arterias del cuerpo son propensas a estrecharse.
Cuando la placa se acumula en las arterias renales y el flujo sanguíneo disminuye, los riñones liberan renina, una sustancia que eleva la presión arterial. Este suele ser el primer signo de estenosis de las arterias renales. Algunas personas también experimentan retención de líquidos, dificultad para respirar, dolores de cabeza e hinchazón de tobillos. Si ambas arterias renales están bloqueadas, puede producirse una insuficiencia renal.
La afección se da con más frecuencia en mujeres que en hombres y en personas mayores de 50 años. Otros factores de riesgo son un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular previos, la diabetes, el tabaquismo, los antecedentes familiares de trastornos renales y los niveles de colesterol poco saludables.
Su cardiólogo del NYU Langone puede sospechar de una estenosis de la arteria renal si usted es de mediana edad y los medicamentos no han conseguido reducir su presión arterial alta.
En primer lugar, el médico realiza un examen físico para buscar síntomas como la hinchazón en los tobillos. También comprueba su presión arterial y realiza un historial médico para evaluar su salud. El médico puede solicitar una o varias de las siguientes pruebas.
Pruebas de sangre
Su sangre puede ser analizada para determinar los niveles de creatinina sérica. La creatinina es un producto de desecho filtrado de la sangre por los riñones y excretado en la orina. Unos niveles elevados en la sangre pueden indicar problemas en la función renal.
Una ecografía Doppler arterial
La ecografía Doppler es una prueba que utiliza ondas sonoras para producir imágenes del cuerpo. Si su médico sospecha que tiene estenosis de la arteria renal, puede solicitar una ecografía Doppler para ver el flujo sanguíneo en las arterias renales. La prueba permite a los médicos evaluar la acumulación de placa e identificar el estrechamiento de las arterias.
Durante la ecografía, un médico o técnico coloca un instrumento manual llamado transductor contra el abdomen. Este dispositivo transmite ondas sonoras que producen imágenes de los vasos sanguíneos y del flujo de sangre a través de ellos. La ecografía puede durar entre 30 y 60 minutos.
Resonancia magnética
Una resonancia magnética utiliza un campo magnético y ondas de radio para crear imágenes tridimensionales computarizadas de las estructuras del cuerpo. Puede ayudar al médico a identificar estrechamientos en las arterias renales y a evaluar si los riñones funcionan correctamente.
Antes de comenzar la prueba, se inyecta un medio de contraste, normalmente en el brazo, para que el médico pueda ver las arterias renales en una pantalla de ordenador. La prueba dura unos 60 minutos.
Exploraciones por TAC
Una exploración por TAC utiliza una serie de rayos X para producir imágenes transversales de las arterias renales. Esto puede ayudar al médico a identificar cualquier estrechamiento de las arterias. Antes de la prueba, el médico puede inyectar un medio de contraste en una vena.
Arteriografía renal
Esta prueba utiliza rayos X y un medio de contraste para producir imágenes de las arterias renales. Puede ayudar a identificar los estrechamientos de las arterias que pueden provocar daños en los riñones y que pueden no ser visibles en una ecografía, una resonancia magnética o un TAC.
En este procedimiento, se introduce un tubo hueco llamado catéter en una arteria cercana a la ingle y se avanza hasta la aorta, la mayor arteria del cuerpo, y luego hasta la arteria renal. Se inyecta un medio de contraste en el catéter y se toman una serie de imágenes de rayos X, denominadas fluoroscopia, mientras el medio de contraste fluye por las arterias renales. Esto permite al médico detectar cualquier estrechamiento en las arterias.
Esta prueba se realiza en el hospital con anestesia local y un sedante. Se tarda entre 30 y 90 minutos en completarla.
Si hay un estrechamiento significativo en la arteria, el médico puede colocar un stent para abrir el vaso sanguíneo en el momento del procedimiento.