El tratamiento UHT requiere tanto un esterilizador como una unidad aséptica (para envasar el producto). Se utiliza para productos de baja acidez (por encima del pH 4,6) como la leche UHT, la leche aromatizada UHT, las cremas UHT, la leche de soja y otras alternativas lácteas. El mismo proceso se utiliza también para esterilizar alimentos preparados, como sopas, salsas, postres, preparaciones de tomate y frutas, y alimentos para bebés.
El nacimiento del tratamiento con alto calor y el enlatado como medio de conservación de alimentos comenzó en Francia a principios del siglo XIX. En 1839, los envases de acero recubiertos de estaño ya se utilizaban ampliamente. En la década de 1960, basándose en esta primera tecnología de conservación de alimentos, Tetra Pak fue pionera en su propio proceso UHT continuo y en los sistemas de envasado aséptico, y así inició el crecimiento del segmento de la leche UHT.
En el tratamiento UHT, el objetivo es maximizar la destrucción de los microorganismos y minimizar los cambios químicos en el producto. Esto significa encontrar la combinación óptima de temperatura y tiempo de procesamiento para los diferentes tipos de alimentos.
Tetra Pak ofrece dos métodos alternativos de tratamiento UHT: directo o indirecto. En el calentamiento UHT directo, se inyecta brevemente vapor en el producto, y esto es seguido rápidamente por un enfriamiento rápido. La brevedad del tratamiento permite alcanzar una calidad de producto muy alta.